miércoles, 9 de noviembre de 2016

FELICIDAD Vs IATROGENIA

Por: Leidy Cañas Torres. Psicóloga. 
Magíster en Psicología. 
Gerente y Representante Legal de la empresa "Gerencia de sí mismo"

"Por ahora elijamos el ruido, lo vulgar, la mentira, el sin sabor". 

No todo esta en el aparentar, en el exterior, en el otro. La dificultad reside en no tener una base, una estructura, un conocimiento de sí. Una persona puede tener dentro de sus objetos favoritos un sin número de cosas materiales, puede tener mucho dinero, abastecerse de todo lo que el medio le brinda. Internamente pareciera tenerlo todo, incluyendo la llamada felicidad brindada por lo medios. 

Qué es en si la búsqueda de la felicidad, será que todo lo que predicen los medios es felicidad. En el día a día, en la multiplicidad de culturas, se observan diferentes enlaces y diversas comunicaciones explicando la manera de alcanzar la supuesta felicidad, ¿cómo elegir?,  es muy común encontrar todo tipo de frases e intervenciones dados a trabajar la alegría, la prosperidad y la teoría -mal referenciada- sobre el aquí y el ahora. 

La felicidad y la salud mental de las personas no se desarrolla al azar, como una ruleta rusa, ni se desarrolla con sonrisas, con una fuerte voz o con mucho entretenimiento.

Detallemos un enfoque de felicidad:

La felicidad y el ego, se relacionan, mucho más de lo que creemos.  cuando “el ego permanece atrapado en intereses superficiales y en una forma infantil, lucha incorregiblemente para hallar felicidad sólo en personas, lugares, cosas o situaciones exteriores, sobre quienes ha proyectado mucho, obligándonos a un desacuerdo con nosotros mismos y a un pavoroso dolor de insignificancia” (Pascal, 1998, p. 104).

Ahora bien, llevar a las personas a estar en un solo lado de la balanza o equilibrio de vida, puede general dolor, traumas y problemas, mucho más de lo que se espera; en ocasiones propiciado por desconocimiento o por una mala intervención.

Encuentros, capacitaciones y asesorías plasmadas bajo temas de superación personal, felicidad, autosuperación, entre otras, requieren de estudio y preparación. Aún sin prever estudios, prácticas, experiencias y aprendizajes requeridos para cualquier tipo de intervención, se requiere un amplio respeto, una pizca de decencia, un poco de congruencia y un tanto de consideración para realizar un encuentro, expresión, publicidad e intervención. 

Bibliografía
Pascal,E. (1998) Jung para la vida cotidiana. 1ra edición. Buenos Aires, Editorial Obelisco, S.L.




No hay comentarios:

Publicar un comentario