miércoles, 15 de febrero de 2017

El DESARROLLO Y SU PERTENENCIA POLÍTICA-SOCIAL

Por: Leidy Cañas Torres. Psicóloga
Gerente y Representante Legal de la empresa "Gerencia de sí mismo"

Al ampliar e indagar sobre percepciones manifiestas en determinadas áreas sociales, se realizará una pequeña descripción alusiva al desarrollo, concepto que genera arraigo y construye realidades a partir de intereses políticos, intereses sociales e intereses económicos; la atención residen en las decisiones que se toman a diario y como el efecto repercute de manera tangible en diferentes contextos y sectores. 

Al confrontar la intención de algunas organizaciones con intereses políticos e intereses personales, se formula la conjetura sobre lo qué es desarrollo. Si le preguntáramos a un grupo indígena, con raíces y conceptos claros a partir de sus tradiciones, sobre el concepto de desarrollo, su respuesta se podría fundamentar con los siguientes aspectos: confianza en sí mismo, adaptación al entorno, conexión con la naturaleza, libertad plena, igualdad, entre otros.

Rist, (2002) manifiesta como por medio del desarrollo se puede generar confianza en sí mismo, participación individual, transformación, equilibrio y crecimiento social. Partiendo de la definición, se encuentra una argumentación altruista, coherente en la estructura y en la intención requerida para transformar las circunstancias de desigualdad, además se adicionan algunos conceptos teóricos en los que se fundamenta el desarrollo con la libertad política, libertad humana, libertad económica y participación social.

Si se realizará un paralelo entre la percepción y la vivencia de un grupo de indígenas y la propuesta demarcada por países desarrollados a partir de las diferentes percepciones concomitantes al desarrollo, se generarían muchas especulaciones e interrogantes; el desarrollo promovido por un grupo de indígenas no estaría obsoleto y se relacionaría con las explicaciones básicas encontradas en elementos teóricos fundamentados por las mismas organizaciones que imparten estos conceptos como son el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (Rist, 2002).

Seguidamente, se realiza la siguiente conjetura, qué pasa con los diferentes acuerdos que se estructuran por medio del llamado desarrollo y qué pasa si un grupo, organización o país especifico no se suma a las acciones planteadas por ellos -FMI, BM-; escuetamente, lo lógico sería que los grupos u organizaciones dedicados a las soluciones, continúen en su labor sin afectar a los que deciden de manera contraria rechazar sus propuestas. 

Una de las organizaciones fundadas para minimizar la desigualdad o subdesarrollo es la del fondo monetario internacional, los cuales orientan y realizar ayudas humanitarias, generan acciones encaminadas al desarrollo y propician condiciones más aptas y adecuadas para el equilibrio y transformación en un país, sector o comunidad (Rist, 2002).

Si lo que se quiere erradicar es el tema de desigualdad y pobreza, se encuentra un sin número de acciones a realizar, procesos, propuestas, ayudas humanitarias y porqué no, la implementación de créditos o prestamos para la solución parcial de las diferentes dificultades que en algunos países se presentan.

Bajo el precepto anteriormente mencionado y relacionándolo con el tema de la libertad, en este caso libertad económica, libertad política y libertad social, los países encuentran opciones hacia las deliberaciones internas y tratados externos disminuyendo su dificultad. Sí un país no requiere ni acepta ayuda, tendría derecho y libertad a proceder tomando sus propias decisiones, pero qué pasa cuándo no lo hacen, inclusive ¿qué pasa con su “Libertad”? (Klein, 2008).

Retomando la definición de “desarrollo”, el concepto termina actuando en contra de su misma finalidad; la creación, la argumentación y la práctica en el ámbito mundial no genera coherencia con su significado. El desarrollo se correlaciona con bienestar, crecimiento y equilibrio; el indicador a observar estaría demarcado en la baja reducción de preceptos, como la disminución de la pobreza, exclusión y desigualdad (Rist, 2002).

Para terminar
Erradicar la pobreza puede que no sea fácil, puede que la búsqueda de equidad y equilibrio sigan siendo un ideal, pero el concepto de desarrollo a trabajar se puede mediatizar por la cultura y la sociedad, se construye por medio de valores, de creencias, de prácticas y actitudes, encaminadas a generar actuaciones altruistas, muy diferentes a las planteadas por algunas propuestas, intenciones u organizaciones.

De acuerdo a las dificultades previstas por algunos contextos, habrá la posibilidad de realizar un cambio de realidad, en el que los intereses personales no dañen, ni perjudiquen valores y creencias culturales, realizando una transformación en el ámbito socio-político y en el ámbito cultural. Las realidades manifiestas en ocasiones son supeditadas, vinculándolas a factores externos, factores de ambición y poder, estas acciones se aprenden dentro de un contexto o grupo social continúan repitiéndose constantemente, desdeñando la igualdad, el altruismo y la solidaridad.

BIBLIOGRAFÍA
Klein, N. (2008)  La Doctrina del Shock: El auge del capitalismo del desastre.  Segunda parte, capítulos 3,4 y 5.  PP. 111 173.
Rist, G. (2002) El desarrollo: historia de una creencia occidental. Introducción.  Editorial la Catarata, Madrid. 



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