Por: Leidy Cañas Torres. Psicóloga, Mg(c) en Psicología
Gerencia de sí mismo permite fomentar proactividad y desarrollar un perfil emprendedor requerido en cada uno de los integrantes de un grupo, empresa o corporación. Gestiona adecuadamente el conocimiento por medio de la comprensión, de la emoción y de la intuición, genera congruencia entre las sensaciones y las percepciones, adelanta exitosamente procesos planeados para innovar, promueve una buena competitividad en el mundo global.
Para una adecuada competitividad la innovación es una de las estrategias relevantes para el sector empresarial, acompañado del servicio, de la calidad, de la entrega oportuna y del precio al público escogido. La estrategia, el modelo, el plan de desarrollo y los programas unánimes fomentan alternativas para lograr efectividad.
“Gerencia de sí mismo” es un paso a seguir, conlleva al entendimiento de diferentes aspectos que irrumpen y se incorporan constantemente en la cultura y en la persona; algunos símbolos o elementos obstaculizan e impiden avanzar, propiciando la necesidad de visualizar y ser conscientes de aspectos inconscientes. Por medio de la vivencia e identidad personal, la persona elige valores, principios y conocimientos, desarrolla pautas para diferenciar lo que quieren los demás y lo que verdaderamente se quiere de sí mismo. Al ampliar aprendizajes, la autogerencia permite compartir experiencias de manera que puedan ser utilizados como un recurso estratégico para el manejo de personal – en caso de tenerlos-. Su fundamento radica en la elección, la voluntad, la motivación y el deseo de ser parte activa del proceso impulsado por la estructura psíquica.
La gerencia de sí, posibilita el éxito, lidera la capacidad y práctica de autogerencia, lleva a conocerse a sí mismo por medio de las debilidades, las fortalezas, los puntos fuertes, los valores, los aspectos conscientes e inconscientes.
A considerar:
Si en el ámbito organizacional el capital humano de un grupo o de una empresa presenta una fractura inconsciente y una fractura en el psiquismo, las percepciones internas podrían obstaculizar, afectando los procesos internos, sin cumplir con la visión y con la meta propuesta en el plan de desarrollo y en el plan de direccionamiento estratégico diseñado para el progreso y para el futuro. En algunas empresas se encuentran buenas adaptaciones, con un adecuado recurso físico, con una adecuada logística y con una adecuada estructura, sin embargo, estos elementos corporativos no respaldan, ni fundamentan la vivencia y el desarrollo de los procesos internos manifiestos en cada uno de sus integrantes e individuos, los cuales plasman, moldean y colorean: la cultura, los valores y el propio psiquismo.
Gerencia de sí mismo permite fomentar proactividad y desarrollar un perfil emprendedor requerido en cada uno de los integrantes de un grupo, empresa o corporación. Gestiona adecuadamente el conocimiento por medio de la comprensión, de la emoción y de la intuición, genera congruencia entre las sensaciones y las percepciones, adelanta exitosamente procesos planeados para innovar, promueve una buena competitividad en el mundo global.
Para una adecuada competitividad la innovación es una de las estrategias relevantes para el sector empresarial, acompañado del servicio, de la calidad, de la entrega oportuna y del precio al público escogido. La estrategia, el modelo, el plan de desarrollo y los programas unánimes fomentan alternativas para lograr efectividad.
“Gerencia de sí mismo” es un paso a seguir, conlleva al entendimiento de diferentes aspectos que irrumpen y se incorporan constantemente en la cultura y en la persona; algunos símbolos o elementos obstaculizan e impiden avanzar, propiciando la necesidad de visualizar y ser conscientes de aspectos inconscientes. Por medio de la vivencia e identidad personal, la persona elige valores, principios y conocimientos, desarrolla pautas para diferenciar lo que quieren los demás y lo que verdaderamente se quiere de sí mismo. Al ampliar aprendizajes, la autogerencia permite compartir experiencias de manera que puedan ser utilizados como un recurso estratégico para el manejo de personal – en caso de tenerlos-. Su fundamento radica en la elección, la voluntad, la motivación y el deseo de ser parte activa del proceso impulsado por la estructura psíquica.
La gerencia de sí, posibilita el éxito, lidera la capacidad y práctica de autogerencia, lleva a conocerse a sí mismo por medio de las debilidades, las fortalezas, los puntos fuertes, los valores, los aspectos conscientes e inconscientes.
A considerar:
Si en el ámbito organizacional el capital humano de un grupo o de una empresa presenta una fractura inconsciente y una fractura en el psiquismo, las percepciones internas podrían obstaculizar, afectando los procesos internos, sin cumplir con la visión y con la meta propuesta en el plan de desarrollo y en el plan de direccionamiento estratégico diseñado para el progreso y para el futuro. En algunas empresas se encuentran buenas adaptaciones, con un adecuado recurso físico, con una adecuada logística y con una adecuada estructura, sin embargo, estos elementos corporativos no respaldan, ni fundamentan la vivencia y el desarrollo de los procesos internos manifiestos en cada uno de sus integrantes e individuos, los cuales plasman, moldean y colorean: la cultura, los valores y el propio psiquismo.
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