Por: Leidy Cañas Torres
Psicóloga.
Magíster en Psicología
Gerente y representante Legal de la empresa "Gerencia de sí mismo"
Las empresas necesitan capacitación constante no solo en el direccionamiento del perfil a ocupar, sino
en el enfoque que se le da al bienestar y a la estabilidad emocional, requerida dentro como fuera de la empresa. Con normas
claras, cohesión y reciprocidad al trabajo, las personas se sentirán con
motivación para trabajar y llevar a cabo los resultados esperados. Sabemos que
cada uno de ustedes tiene o presenta una motivación diferente, sin embargo, ¿a
quién le gusta que lo traten mal? o ¿a quién le gusta sentirse menospreciado porque realiza
un adecuado trabajo?.
A la organización y a la empresa
hay que capacitarla, es por esto que la formación es necesaria para todos los
participantes y porque no, “uno” el mensaje con recomendaciones dadas hacia los
adultos, -expuesta por Carl Gustav Jung-. Aunque en las empresas encontramos
personas jóvenes y con un ímpetu por recorrer, por medio de la interacción y el
aprendizajes continuo se logra y se llega a un verdadero cambio.
Hay quien
cree incluso que las travesuras infantiles son propiedad inmutables del
carácter porque se dan también en los adultos, que ya están educados y ya no
son educables. Esto es un gran engaño. También el adulto es educable: puede ser
incluso un objeto agradecido del arte individual de educar” (Jung, 2010, p.56).
(…) “El método educativo válido para un adulto no puede ser directo, sino
indirecto, es decir, hay que proporcionarle los conocimientos psicológicos que
le permitan educarse a sí mismo (Jung, 2010, p. 57).
De esta manera al individuo y al adulto se
educa, pero a los integrantes de una empresa también se requieren capacitar, llevando a fomentar un norte, y con la batuta en la mano -no en el imaginario- se es parte y se llega a demostrar que cada labor y cada ejercicio en práctica también es fundamental para que la misión y la visión se efectúen con una buena reciprocidad y disposición.
Cada integrante es importante, y se toma como referencia la labor desempeñada por la empleada de servicios generales como por el gerente general; el uno genera la reciprocidad con el otro, todos son un complemento en su gran medida. Cada uno se enfoca en su hacer, en su saber y en su misión.
Cada integrante es importante, y se toma como referencia la labor desempeñada por la empleada de servicios generales como por el gerente general; el uno genera la reciprocidad con el otro, todos son un complemento en su gran medida. Cada uno se enfoca en su hacer, en su saber y en su misión.
Seguidamente el “Trabajo en
equipo” lleva a un encuentro de sí mismo y con el otro, lleva al fundamento
social e integral y es por esto que por medio del análisis en diferentes roles
grupales y roles profesionales, aunados con los procesos de organización y
coordinación, es viable la adquisición de fundamentos para desarrollar formas
de pensamientos y cambios de realidad en diversos contextos: individual, social
y empresarial.
El trabajo en equipo se fundamenta
en un interés general más no individual, con valores, normas y metas definidas.
Las relaciones productivas y respetuosas son una prioridad, donde las
responsabilidades son compartidas. La agresividad, la ironía, el interés
particular y el egoísmo se desligan dando prioridad a la interacción armoniosa,
al objetivo común.
Finalmente, uno de nuestros
clientes se nos unió y con él formulamos acompañamientos y estrategias para que
los fines en la empresa tengas unos mejores resultados. Recuerda es mejor capacitar que verse en la idea de que las cosas saldrán bien, solo porque estás ahí. Es mejor informar con agrado, con un gusto y con dedicación.
BIBLIOGRAFÍA
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Jung, C. G. (2010). Sobre el desarrollo de la personalidad.
Madrid: Trotta.
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