martes, 18 de octubre de 2016

El dolor ocasionado por el otro


En ocasiones nos topamos con encuentros y realidades dolorosas, dadas en diferentes ámbitos y contextos, - familiar, interpersonal, laboral- algunas de ellas, pueden darse por el miedo, por la ignorancia y por la poca observación de sí mismo, aun así, la situación es querer evitarlas y evadirlas tratando de no ver la realidad. El dolor ocasionado por el otro es irreparable, no tiene justificación. Esta ahí.

Se abre la expresión y la pregunta, ¿¡Si me esta pasando esto a mi!? Pareciera que se unificará con el principio de negación generado por la perdida de un ser querido; los pensamientos continuos se representan sacando miles de excusas, justificando o evadiendo la situación.
Pero ¿qué hacer? Lo recomendable es seguir los principios y recursos personales sin vender la propia consciencia, enfrentando el dolor y la realidad, (sentir el dolor, tenerlo de frente). Hay acciones y expresiones irreparables; si se actúa bajo el perdón hay que tener cuidado de no repetir acciones de maltrato o seguir en un circulo vicioso. Se debe actuar, dejando ese basta ya, dejando las reciprocidad a las acciones de evitación y daño promovido por el otro, simplemente se necesita avanzar.


Leidy Cañas Torres. Psicóloga.

No hay comentarios:

Publicar un comentario